San Sebastián es otra de las ciudades costeras bañadas por el Cantábrico que no puede faltar en nuestro blog. Donostia, como comúnmente se le conoce, es una de las ciudades del norte de España más conocidas a nivel mundial. No en vano ha salido en decenas de reconocidas revistas turísticas de todo el mundo y eso e ha hecho ganar reputación entre el turismo extranjero.
Aquí, en España, hace tiempo que la conocemos y podemos decir que bien merece la pena ser visitada, aunque sea un fin de semana.
Os vamos a mostrar un pequeño itinerario con cosas que hacer durante un par de días para que no os perdáis nada y disfrutéis de la ciudad al máximo.
Qué hacer en dos días en San Sebastián
Lo más normal es que os acerquéis a Donosti un fin de semana, así que vamos con un itinerario empezando el sábado.
Lo mejor es que madruguéis para dar un paseo por La Concha, la playa más bonita y reconocida de la ciudad. Tiene un bonito paseo a su alrededor que os llevará desde el ayuntamiento hasta la parte baja del Monte Igueldo, pasando por la playa de Ondarreta también. Entre ambas playas veréis un túnel que las separa. No dejéis de subir a lo alto del túnel donde podéis ver el Palacio Miramar, antigua residencia de veraneo de la Casa Real. Desde ahí podréis sacar una de las fotos más bonitas de la bahía.
Una vez habéis llegado al Monte Igueldo, preguntar donde se coge el funicular, un pequeño tren cremallera que os subirá hasta lo más alto. Ahí encontraréis un parque de atracciones de lo más curioso. Es muy antiguo y sus atracciones a buen seguro no os causará vértigo alguno, pero bien merece una visita, no solo por las atracciones sino por la panorámica de toda la ciudad que tendréis desde ahí arriba.
Una vez de vuelta a la parte baja del monte, os recomiendo coger un taxi y que os lleve de vuelta hasta la parte vieja de la ciudad. Será hora de comer así que lo mejor es aprovechar y comer unos pinchos en alguno de los bares más famosos de la ciudad. En la calle Fermín Calbetón por ejemplo encontraréis algunos de ellos, como el Borda Berri, donde no os podéis perder sus estupendos risottos, o el Goiz Argi, donde tendréis una amplia barra de pintxos fríos o calientes donde saciar vuestro paladar.
Por la tarde, después de comer, os recomendamos algo tranquilo como visitar por ejemplo el Aquarium, uno de los más grandes e importantes de España. Es la atracción más visitada de la ciudad. Fue remodelado recientemente y bien merece la pena ser visitado. Si prefieres una visita más cultural, te puedes acercar también al Museo San Telmo que se encuentra igualmente en la parte vieja de la ciudad. Lo que antiguamente fue un convento dominico, hoy en día es un museo que alberga diferentes colecciones que pueden merecer más o menos la pena ser visitadas, pero el edificio no deja indiferente a nadie y puede ser una visita interesante. En su interior podemos ver un edificio clásico mientras que por fuera fue también remodelado hace poco y veremos una fachada curiosa llena de agujeros y plantas que brotan de ellos.
Por la noche, si tu bolsillo te lo permite y aún tienes hambre, puedes ir a comer a alguno de los famosos restaurantes de la ciudad, eso si, prepara bien el bolsillo pues comer en un restaurante con estrella michelín siempre ha sido caro…
El domingo, según te levantes, te recomendaríamos un paseo por la tercera playa de la ciudad que aún no conocemos, la playa de la Zurriola. En ella veremos el palacio de congresos Kurssal, donde se celebra el famoso festival de cine de la ciudad. Así mismo, al final de la playa, veremos probablemente a decenas de surfistas practicando este deporte. Esta playa es una de las más prestigiosas de la península para hacer surf. Cada vez está cogiendo más fama y es común ver gente de todas las nacionalidades practicando surf, sobre todo en verano que es cuando más turismo tiene.
Después del paseo os quedaría adentraros un poco en el centro de la ciudad y visitar por ejemplo la Plaza de Guipúzcoa, un bonito parque con un estanque con patos. También podéis visitar la Plaza del Buen Pastor, donde se encuentra la catedral que lleva el mismo nombre, una catedral de estilo neogótico construida en el año 1897. Si os ponéis justo en la puerta de la catedral y miráis hacia la parte vieja, veréis justo al otro extremo la iglesia de Santa María en la parte vieja. Ambas iglesias están dispuestas una frente a la otra con una calle recta libre de obstáculos.
Como veis, en un fin de semana en San Sebastián podéis ver muchas cosas y sacarle mucho partido.
Dónde dormir
Los hoteles en San Sebastián la verdad es que no suelen ser muy baratos. Es una de las ciudades más caras de España para pasar unos días pero si tan sólo vas a estar un par de días lo mejor es coger un hotel que esté bien situado en el centro de la ciudad, aunque os vaya a costar un poco más. Esto so permitirá ir andando casi a cualquier sitio de Donosti y tenerlo todo a mano.
Si por el contrario pensáis pasar más días, mi recomendación es que miréis algún apartamento por el centro de la ciudad. Hay muchos apartamentos que si bien tampoco son baratos, los podéis compartir entre varias personas y os darán mucha más libertas además de salir más económico.
En definitiva, si aún no conoces San Sebastián mi recomendación es que prepares una escapada con tu pareja o amigos. Es una ciudad muy bonita y que se puede disfrutar en una escapada corta de 2-3 días.